La pieza clave al implementar IA es el factor humano

Aunque la inteligencia artificial está revolucionando la forma en que las empresas operan, su éxito no depende únicamente de la tecnología, sino de las personas que la implementan y la gestionan, afirma la empresa de servicios tecnológicos Kyndryl. Es decir, que para que la empresa pueda adaptarse a la IA, fortalecer la confianza en la tecnología y promover una cultura de cambio, las herramientas de IA deben integrarse de forma eficiente en las operaciones diarias.

De acuerdo con el Readiness Report de Kyndryl, basado en una encuesta global a 3.200 ejecutivos, en México, el 78 % de las empresas están invirtiendo en inteligencia artificial tradicional, lo que representa un aumento de dos puntos en comparación con el promedio global. Sin embargo, solo el 49 % ve un retorno positivo, lo que indica que la adopción de la IA sigue enfrentando desafíos, tales como las preocupaciones por la privacidad, la incertidumbre sobre el retorno de inversión y la falta de conocimiento en su implementación.

Los resultados desfavorables del uso de la IA se deben a que las empresas caen en un "optimismo tecnológico", asumiendo que implementar soluciones de inteligencia artificial traerá resultados de manera inmediata solo por la tecnología per se, cuando “su verdadero valor reside en la correcta integración de las tecnologías dentro de los procesos humanos”, explican desde Kyndryl.

Una ejecución efectiva de la IA requiere que los líderes alineen la tecnología con los objetivos del negocio y la incorporen estratégicamente, empleados que la adopten y la usen correctamente, y un ambiente organizacional que fomente la confianza y la colaboración. Así se podrá evitar problemas como datos deficientes y una incorrecta adopción.

“A medida que la tecnología evoluciona, los líderes empresariales deben ser los agentes de cambio para capitalizar el potencial transformador de la IA y asegurar los resultados positivos”, subraya Carlos Marcel, director general de Kyndryl México.

Más allá de los algoritmos y los datos, el verdadero valor de la IA radica en la manera en que se potencian las capacidades humanas, se impulsa la innovación y se transforman los procesos para generar un cambio significativo en las empresas, destacaron desde Kyndryl.