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MIA, la nueva asistente del Estado argentino para simplificar la vida a emprendedores y pymes

El gobierno argentino, Botmaker y Meta lanzaron el primer agente de inteligencia artificial nacional. Desarrollada sobre el modelo Llama, MIA busca agilizar trámites, facilitar el acceso a la información y ofrecer asistencia personalizada para el ecosistema pyme.

La Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología (SICyT), la empresa argentina de herramientas y asistentes de inteligencia artificial Botmaker y Meta presentaron MIA, el primer agente de IA integrado en TINA, el chatbot oficial del Estado Nacional.

En su primera etapa, MIA asistirá a emprendedores y pequeñas y medianas empresas, ayudando a simplificar la constitución de negocios, orientar sobre exportaciones y acceder a servicios estatales de manera más ágil y conversacional. El nuevo sistema se integra también con la app de gestión pública Mi Argentina, que ya cuenta con más de 26 millones de usuarios.

“Implementar inteligencia artificial en la gestión pública significa mejorar la prestación de servicios y avanzar hacia una administración más ágil, innovadora y centrada en las necesidades de la ciudadanía”, señaló Darío Genua, secretario de Innovación, Ciencia y Tecnología de la Nación.

El potencial es concreto: solo en Mi Argentina, la mesa de ayuda recibe más de 80 mil consultas mensuales. MIA permitirá aliviar esa carga, brindando respuestas instantáneas y precisas, y ahorrando miles de horas de espera a ciudadanos y empresas.

Un caso de IA pública hecha en Argentina

Para su desarrollo, el gobierno se apoyó en el modelo Llama, de código abierto, creado por Meta. Esta elección no es menor; se trata de una arquitectura de IA que ofrece mayor velocidad de procesamiento, costos más bajos y la posibilidad de operar sobre infraestructura propia.

“La creación del agente de IA MIA junto al gobierno y la tecnología Llama de Meta representa una innovación en cómo los ciudadanos acceden a la información y los servicios del Estado. Desde Botmaker, diseñamos a MIA con énfasis en la seguridad de los datos y la escalabilidad. MIA es capaz de entender y responder con lenguaje natural sobre una infraestructura que prioriza la privacidad, auditoría y gestión local de los datos”, explicó Alejandro Zuzenberg, cofundador de Botmaker.

El desarrollo implicó importantes desafíos técnicos. Uno de los mayores fue ajustar un modelo tan amplio como Llama para que entienda el contexto puntual de MIA. “Hay que entrenar el modelo con la información correcta, acotar el alcance y asegurarse de que las respuestas estén alineadas con los contenidos oficiales. Es fundamental que el modelo responda como corresponde”, agregó Zuzenberg.

Un punto clave del proyecto es su enfoque en la privacidad y soberanía tecnológica, temas sensibles en el ámbito público. “Trabajar con un modelo de código abierto permitió crearlo en un entorno completamente privado. La información no circula fuera del sistema, algo fundamental para un organismo público”, detalló el ejecutivo de Botmaker.

Zuzenberg indicó que, aunque este enfoque requiere más trabajo porque implica desarrollar y mantener infraestructura propia, permite a la administración pública controlar los datos y garantizar estándares de seguridad equivalentes a los de los proveedores globales. “Para un gobierno, tiene total sentido realizar este esfuerzo para garantizar la seguridad de la información y el correcto tratamiento de los datos”, sostuvo.

Desde Meta creen que el desarrollo de MIA es una prueba contundente de los beneficios de crear inteligencia artificial con un enfoque de código abierto, como Llama. “Este tipo de implementaciones permite un trabajo más rápido y económico, más seguro –ya que posibilita manejar la información en servidores propios– y de mayor impacto, porque facilita que la población acceda a servicios del gobierno con tecnología de punta y de una manera más eficiente”, afirmó María Julia Díaz Ardaya, directora de Políticas Públicas para Meta en Sudamérica.

El foco en pymes y el modelo de colaboración público-privada

MIA comienza su recorrido atendiendo al segmento emprendedor y pyme, un público que suele enfrentar barreras de información y trámites complejos. “Hoy, MIA ofrece información clara y guía a quienes emprenden o gestionan una pyme. A futuro, podría crecer de forma modular, sumando agentes más especializados en diferentes áreas. De esa manera, cada nuevo agente aportaría más precisión y agilidad”, adelantó Zuzenberg.

El cofundador de Botmaker destacó también el valor del modelo colaborativo detrás del proyecto: “Definitivamente, este tipo de colaboración público-privada es muy productiva. No tiene sentido que un gobierno busque convertirse en especialista técnico en estos temas, y al mismo tiempo, en Argentina tenemos el talento y los equipos para innovar y trabajar junto al sector público. Este proyecto entusiasma porque, del lado del gobierno, hay una actitud muy colaborativa, con curiosidad y un nivel de innovación notable, un equipo comprometido y enfocado en el ciudadano”.

TINA, el chatbot estatal donde ahora se integra MIA, nació en gestiones anteriores, y se consolidó como una herramienta transversal que trasciende los cambios políticos. “Eso habla de continuidad más allá de cualquier gestión, y de una apuesta sostenida por seguir mejorando e innovando”, destacó Zuzenberg.

En definitiva, MIA es un paso más hacia una gestión pública más inteligente, ágil y cercana. Y también un ejemplo de cómo la colaboración entre Estado y sector tecnológico local puede generar soluciones reales para quienes más lo necesitan: las pymes, que son el motor del empleo y la innovación en Argentina.

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