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La mujer en la industria TI: sus aportes y los desafíos por vencer

Aunque hoy hay paridad de género en las empresas de TI en los niveles de entrada, en los puestos de liderazgo sí se evidencian grandes brechas, en presencia y nivel de sueldos, afirman expertos chilenos.

Hoy en día, es posible encontrar presencia femenina en diversas áreas laborales, en diferentes funciones y en empresas de todo tamaño. Sin embargo, aún existen diferentes obstáculos y desafíos para que esta presencia pueda plasmar todo su potencial.

En las empresas del sector tecnológico, si bien la presencia de la mujer ha aumentado en los últimos años, aún hay mucho trabajo por hacer. Sobre todo, en un contexto como el actual, en el cual la escasez de talento es una realidad en el mundo TI. Según el reporte “Talent Shortage” de ManpowerGroup, el 76 % de las empresas globales luchan por cubrir las vacantes de colaboradores de TI y tecnología.

Analizando el tema en detalle, nos encontramos con que, en el caso de las empresas TI, la participación femenina se sitúa en alrededor del 20 %, cifra que disminuye al tratarse de puestos directivos. En este sentido, Paula Casarejos, gerente de Personas y Cultura de Kibernum, sostiene que, “de manera transversal, vemos cómo a medida que va aumentando la escala jerárquica, la mujer va tomando menos protagonismo. Esto pasa por los estereotipos que existen y la creencia de que las mujeres no se asocian fácilmente al rubro STEM, por lo tanto no se piensa en ellas para cargos directivos de áreas especializadas”.

Carolina Sepúlveda

A juicio de Carolina Sepúlveda, directora de Experiencia & UX en BBK+2Brains, hoy existe una brecha importante con respecto al liderazgo: “Habitualmente, cuando las personas inician sus carreras profesionales, suele haber paridad de género en las empresas del rubro TI. Pero es en los puestos de liderazgo donde se comienzan a evidenciar mayores brechas. Según el último reporte del Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (SENCE), de las 10.358 personas con perfiles vinculados a este mundo, solo un 16 % son mujeres”, dice.

Respecto de la participación de la mujer en funciones y roles operativos tecnológicos de las empresas, como pueden ser desarrollo o mantención, si hace 10 años era poco probable ver a una mujer en soporte o instalando redes, esa imagen ya está quedando en el pasado. Sepúlveda sostiene que aún hay un espacio bastante grande de crecimiento y de oportunidades en áreas que permiten formarse y actualizarse a través de cursos abiertos (y muchas veces gratuitos) y que, por su naturaleza, propician la conciliación entre la vida personal y la profesional.

En el mismo sentido, Casarejos expresa que la inclusión femenina en tareas operativas es un poco mayor que en el caso de los cargos gerenciales o directivos; sin embargo, se mantiene una baja participación de las mujeres. En ese sentido hay que destacar el estudio “Mujeres en Tecnología Latam” de Grupo IT-Talent, que indica que la cantidad de mujeres que trabajan en TI en la región es solo de un 23 %, y Chile destaca como el país de menor presencia femenina, con un 18 %.

Paula Casarejos

“Esto se debe a los estereotipos acerca de que los perfiles de las mujeres no son afines al rubro de la tecnología y las carreras STEM. Esas creencias, lamentablemente, se van transformando en realidades. Tenemos muy pocas mujeres que se especializan en estas áreas debido a estos mitos que seguimos fomentando y los sesgos inconscientes que seguimos teniendo. Sí, creo que la participación está aumentando de a poco; de hecho, según el mismo reporte, el 40 % de las mujeres contratadas corresponden a aquellas que se han capacitado en TI últimamente, a pesar de tener otros estudios. Esto nos demuestra que hay interés de su parte por entrar a este rubro. Mientras más iniciativas impulsemos para emparejar la cancha, le daremos más oportunidades a las mujeres y fomentamos su desarrollo en estas áreas y así vamos a ir avanzando”, enfatiza Casarejos de Kibernum.

Los atributos que la mujer aporta a las empresas TI

Jorge Gamero Cabrejos, gerente general de ManpowerGroup Chile y director en Experis Sudamérica, sostiene que tenemos que cambiar la narrativa en torno a las mujeres en la tecnología. Ya que no hay escasez de mujeres con talento, sino solo escasez de oportunidades y apoyo.

Jorge Gamero

“El valor que le atribuyen las mujeres a la industria TI es crucial. Desde la mejora de la cultura corporativa, pasando por el impacto en el clima laboral, el aumento de resiliencia y pensamiento resolutivo, hasta la generación de resultados económicos positivos. Todos son atributos que cualquier empresa, en un entorno tan incierto como el actual, desearía alcanzar. Las empresas deben crear una cultura de trabajo solidaria e integradora que valore la diversidad y fomente la colaboración mediante iniciativas de diversidad e inclusión, políticas que promuevan el equilibrio entre la vida laboral y personal, así como el apoyo a la salud mental, todo esto valorando el importante aporte de las mujeres en tecnología”, detalla Gamero.

Por su parte, Paula Casarejos, explica que, en cualquier rubro, las mujeres aportan mucho ya que poseen una mirada distinta. “Somos considerablemente más multifacéticas, con una visión multifactorial porque estamos acostumbradas a hacer muchas cosas a la vez. En muchos casos, tenemos la experiencia de la maternidad y de, históricamente, hacernos cargo de las labores del hogar –algo que de a poquito va cambiando– y esto nos ha hecho desarrollar mucho mejores competencias a la hora de fijarnos en detalles y de poder hacer varias cosas a la vez. De más está decir que, en general, las mujeres tenemos una sensibilidad y empatía mucho mayor, y esto también es un aporte”, destaca.

La ejecutiva agrega que las mujeres pueden aportar enormemente en un rubro duro como es la tecnología. La capacidad de innovación de la mujer es muy alta porque tiene que arreglárselas continuamente con lo que tiene.

¿Qué ocurre con los sueldos y salarios de la mujer en la industria TI?

En Chile y en el mundo existe todavía una diferencia salarial importante, y el rubro de TI no es una excepción. Según datos del Instituto Nacional de Estadísticas, las mujeres en Chile reciben en promedio un sueldo 27 % menor que el del hombre, mientras que en Latinoamérica la brecha es de 14,5 %. A nivel de mercado, hay una brecha que sigue existiendo y, al ser la industria de TI considerada masculina, es aún más significativa.

Gamero, de Experis Sudamérica, señala que la brecha salarial entre hombres y mujeres es un problema persistente en la industria tecnológica y, para solucionarlo, las empresas deben realizar auditorías salariales periódicas y asegurarse de que las mujeres reciben una remuneración justa y equitativa. Además, las empresas pueden crear transparencia en torno a la remuneración y los ascensos, proporcionando directrices claras sobre cómo se toman estas decisiones. “Lograr la igualdad de género en la tecnología es crucial no solo para crear un equipo más diverso e inclusivo, sino también para promover la innovación e impulsar el crecimiento económico”, resalta.

De acuerdo con cifras de la International Labour Organization (ILOSTAT), cuando las mujeres consiguen un trabajo digital se enfrentan a una brecha salarial media de género del 21 %, frente al 16 % del resto de las industrias. En este sentido, existen varios factores que contribuyen a la brecha salarial. Por ejemplo, la discriminación de género, la falta de diversidad en la contratación y promoción, y la falta de transparencia en los procesos de remuneración.

“A menudo, las mujeres son subrepresentadas en los puestos de liderazgo y, por lo tanto, tienen menos influencia en la definición de los salarios y los procesos de toma de decisiones. La buena noticia es que cada vez hay más empresas tecnológicas desarrollando políticas que promueven la diversidad y la inclusión en la contratación y promoción interna. También, son cada vez más las profesionales que al interior de sus empresas se organizan en círculos de mujeres para abordar sus desafíos laborales y de género”, explica Carolina Sepúlveda, de BBK+2Brains.

El futuro de la integración de la mujer en esta industria

Mirando el futuro, los expertos consultados coinciden en que se está avanzando, gracias a diversos programas, redes e iniciativas de inclusión. Sin embargo, se requiere que los directivos de las empresas estén comprometidos con el objetivo “de emparejar la cancha” y cerrar la brecha de género. “Necesitamos mucho apoyo y sobre todo ser capaces de desarrollar programas que, de alguna manera, fuercen a aquellas organizaciones donde no es tan fácil lograr la equidad. Creo que tiene que haber un cambio cultural que debe partir desde la casa con una enseñanza y transformación que veo más evidente hoy día en nuestros niños. Aún falta, pero soy optimista”, dice la gerente de Personas y Cultura de Kibernum.

Considerando que en el mundo público y privado se están generando iniciativas que incorporan políticas de diversidad y que promueven la igualdad de género en el lugar de trabajo, nuestros entrevistados indican que también es importante hacer un llamado a quienes ejercen los roles de liderazgo, para tomar el compromiso real de formar nuevos talentos femeninos. “El talento senior en algún momento fue junior, y alguien debe formarlo. Son los y las líderes quienes debemos tomar esta responsabilidad. Para el éxito de la equidad, no solo se trata de sumar mujeres a los equipos, sino que las empresas tengan el compromiso. Para generar cambios reales es necesario salir a buscar y formar a las nuevas líderes en tecnología. Estamos en deuda, y hay que generar los espacios, protocolos y cultura necesaria para entregar espacios reales de desarrollo, con convicción”, resalta la directora de Experiencia & UX de BBK+2Brains.

Finalmente, el gerente general de ManpowerGroup Chile y director de Experis Sudamérica, sostiene que no hay una solución única para este problema, “pero lo que no podemos hacer es aceptar el statu quo y esperar a que las cosas se arreglen solas. Debemos unirnos para actuar, ya que solo de esa manera podemos crear una cultura más integradora e inclusiva, facilitando el acceso a la educación y la formación, y empoderando a las mujeres para que se conviertan en líderes de la industria TI. Al hacerlo, no solo estaremos ayudando a las mujeres, sino que podremos mejorar la industria tecnológica, haciéndola más justa, equitativa y sostenible al mismo tiempo”.

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