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Hardware a la baja y nube al alza en Perú

La desaceleración en importaciones de servidores y computadoras es una constante en el sector privado peruano este año. Solo hay alzas en compras en el sector público, quienes tiene una agenda aparte. El dinamismo del entorno privado se mantiene, por ahora, alrededor de la nube.

A nivel global, los analistas de Gartner han advertido que este año el gasto mundial en tecnología crecerá menos de lo previsto y bordeará el 9,8 % anual, gracias a un creciente interés en implementar software de aplicaciones y concretar el viaje a la transformación digital, algo que no se consigue de inmediato. Pese a las alzas en precios, producto de la inflación y la escasez de talento especializado, aseguran que la demanda no decaerá tanto como se podría esperar en un escenario de guerra como el actual.

Coincidieron con esta tendencia los analistas de IDC, quienes pronosticaron para Latinoamérica un crecimiento de 9,4 % año contra año, sobre todo por el gasto en software de gestión e integración de datos, analítica inteligente, nube y todo lo que viabilice la innovación y la transformación de las empresas.

En cuanto al hardware, IDC ha sido clara en afirmar que, a nivel global, la venta de PC decrecerá 8,2 % frente al 2021, pues solo se venderán 321,2 millones de unidades. Esto se deberá a la citada inflación, que eleva los precios, la guerra entre Rusia y Ucrania (productor de casi la mitad del gas neón que se usa para fabricar microchips) y los efectos de la pandemia, incluido el cierre de puertos en China por la política de cero contagios. Ya en el primer trimestre del 2022, las principales marcas han visto un estancamiento o muy ligero crecimiento (menos de un punto porcentual) que esperan revertir para el 2023.

En el Perú, los efectos de todos estos problemas globales se están sintiendo e intensificando por un contexto político poco estable. Según Fernando Grados, director de Dominio Consultores, la guerra ha afectado la economía de todos los países, incluido el Perú, generando más inflación de la que ya había ocasionado la covid-19. “Muchos países han tomado medidas contracíclicas para tratar de mitigar el impacto de la inflación, pero en nuestro país no se está haciendo nada. Por tanto, creemos que sí nos afectará seriamente. Es probable que en el 2022 no haya crecimiento en la industria”, afirmó.

En el primer trimestre del 2022, reportó Grados, cayeron las importaciones de todas las categorías de hardware, a excepción de portátiles, que creció 20 % en unidades frente al mismo periodo del año anterior. Aun cuando estiman que puede darse una recuperación en el segundo semestre, hay un sobre stock de producto en las cadenas minoristas porque el consumidor está recortando gastos, fruto de la recesión. En el 2021 no se tenía este escenario: solo hubo una caída considerable en la categoría de impresoras debido al trabajo remoto impuesto por la pandemia.

Las importaciones de computadoras de escritorio han caído un -16 % anual y reportan bajas para todas los modelos, con excepciones en algunas marcas, como Apple (+30 %) y Acer (+15 %). Incluso la categoría Gamer, que venía al alza en el 2021, ha disminuido sus embarques de PC de escritorio en -15,7 % y -1 % en portátiles. En laptops, Apple cae (-64 %) y Lenovo crece (+54 %), destronando del primer lugar a HP.

El mercado de servidores, según Grados, se mantuvo estable durante la pandemia. Sin embargo, este trimestre ha empezado a declinar con respecto al año anterior (-20 %). Todas las marcas caen, incluido el líder HP (-17,3 %). “Es algo fuerte, pero tenemos la esperanza de que se va a recuperar la demanda corporativa y del Estado”, dijo.

La mitad de la demanda de hardware en el Perú está compuesta por el consumidor final (hogar). En el 2021, según los reportes de Dominio Consultores, las empresas movieron el 40 % del mercado y el Estado un 10 %. Este año, la situación podría ser distinta. Fernando Grados refirió que, en el primer cuatrimestre del 2022, el Estado compró 49 % más unidades que en el mismo periodo del 2021 en lo que respecta a computadoras, impresoras y consumibles de impresión (tintas). Esto significó 325 mil unidades en el 2022, versus 218 mil unidades en el año anterior.

Si se analiza las compras al detalle, dijo, tenemos que la compra de computadoras creció 647,4 %; la de consumibles, 29,9 %; y la de impresoras, 46,1%. El alza es mayor si miramos los valores, pues el Estado pasó de invertir S/ 68 millones de soles (casi US$ 18 millones) a S/ 231 millones (más de US$60 millones), eso quiere decir que creció 243 %. “El gobierno ha comprado unidades a buen precio y está abriendo una oportunidad para que las marcas puedan colocar productos de gama alta”, remarcó.

El fenómeno de la nube

Donde se observa un mayor crecimiento es en el servicio de la nube, añadió Grados, lo que termina afectado la demanda de servidores. En el Perú, el uso de servidores pequeños es realizado por todo tipo de organización: una pequeña empresa lo utiliza como servidor de archivos y una gran empresa lo tiene para hacer pruebas de aplicaciones. Para las marcas que los comercializan, explicó, es un segmento que todavía puede ser interesante como complemento a los servicios en la nube, que son los grandes protagonistas de la inversión en tecnología.

A nivel global, los servicios de nube, según Gartner, crecerán un 20,4 % frente al año anterior y alcanzarán US$500 mil millones el 2022, y US$600 mil millones el 2023. Amazon Web Services (AWS) sigue liderando el mercado, pero sus rivales (Google, Microsoft) tienen un alza muy acelerada. Huawei incluso pronostica que el 80 % de las empresas usará tecnologías nativas de la nube para el próximo año.

En Latinoamérica, IDC estima un crecimiento de 30,4 % en el 2023 porque hay gran interés en el sector corporativo por migrar sus sistemas hacia la nube. Perú también viene con una tendencia ascendente. IDC estimó que el alza del 2021 frente al 2020 fue del 40 % y este año continuará con un buen nivel de dinamismo. 

Un estudio de Dominio Consultores estableció que el 66 % de las empresas grandes y medianas ya usan la computación de nube, principalmente para almacenamiento, ofimática y ERP. El número es significativo porque refleja una mayor adopción frente al mismo estudio de años anteriores. De hecho, un 22 % de los usuarios son recientes y llegaron como fruto de las exigencias de digitalización impuestas por la pandemia. Y este año, aseguraron, seguirán sumándose muchas  empresas más. 

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