Identidad de las cosas (IDoT)

La identidad de las cosas (IDoT) es un área de esfuerzo que implica asignar identificadores únicos (UID) con metadatos asociados a dispositivos y objetos (cosas), permitiéndoles conectarse y comunicarse eficazmente con otras entidades a través de internet.

Los metadatos asociados con el UID definen colectivamente la identidad de un punto final. La identidad de las cosas es un componente esencial de la internet de las cosas (IoT), en el que casi todo lo imaginable se puede abordar y poner en red para el intercambio de datos en línea. En este contexto, una cosa puede ser cualquier entidad –incluyendo objetos físicos y lógicos– que tenga un identificador único y la capacidad de transferir datos a través de una red.

La direccionabilidad hace posible que las cosas sean orientadas y encontradas. Para ser direccionable para la internet de las cosas, una entidad debe ser globalmente identificable de manera única, lo que significa que debe estar asociada con algo –normalmente una cadena alfanumérica– que no está asociado con nada más.

Sin embargo, para hacer que la comunicación entre las cosas sea efectiva y segura, es crucial hacer que más información acerca de sus identidades esté disponible para otras cosas. A continuación, se presentan algunas de las consideraciones esenciales para las identidades de las cosas de IoT:

Ciclo de vida: Algunas entidades de IoT pueden tener vidas bastante extensas. Por ejemplo, el registro médico electrónico (EMR) de un individuo es un objeto lógico que mantiene su identidad a través de la vida de la persona. Por otro lado, algunas otras entidades tienen ciclos de vida muy breves. Una parcela, por ejemplo, solo existe como una entidad desde el momento en que se envía, hasta el momento en que se recibe.

Relaciones: Es importante saber cómo una entidad IoT está relacionada con otras entidades, incluyendo no solo otras cosas, sino también entidades externas como propietarios, administradores y otras partes responsables.

Conciencia de contexto: La gestión de identidad y acceso (IAM) para las entidades de IoT debe tener la capacidad de depender del contexto. Puede ser apropiado, por ejemplo, que una entidad acceda a otra entidad o sistema bajo ciertas circunstancias, e inapropiado –o incluso peligroso– que se le conceda acceso de otra manera.

Autenticación: La autenticación multifactor es eficaz para validar a los seres humanos, pero menos para las cosas de IoT porque muchos métodos –verificación biométrica, por ejemplo– no son relevantes. Es necesario encontrar otros medios para autenticar de forma segura las identidades de IoT.

Vea una presentación de IEEE sobre las consideraciones para asegurar identidades para entidades en la internet de las cosas: