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Eviten arruinar la migración de Windows XP a Windows 10

¿Su empresa va a mudarse de Windows XP a Windows 10? Microsoft no admite actualizaciones locales o de salto rápido, por lo que es probable que requiera un inventario de hardware, pruebas de compatibilidad de aplicaciones y una instalación limpia en el futuro.

Las organizaciones que continúan ejecutando Windows XP deberían considerar realizar una transición eventual a Windows 10, pero la migración no será fácil para todos. Microsoft no soporta migraciones sobre las versiones existentes y los saltos son riesgosos. La mejor opción de la mayoría de los departamentos de TI es realizar una instalación limpia de Windows 10.

Windows XP llegó al final de su período de soporte extendido en abril de 2014. El sistema operativo continúa funcionando, pero Microsoft no lo soporta, y muchos proveedores de hardware ya no crean controladores de Windows XP. Como resultado, a la mayoría de los administradores de TI no les interesa mantener Windows XP.

La transición de Windows XP a Windows 10 es una tarea más grande que la migración de Windows 7 o Windows 8.1 al nuevo sistema operativo. Una razón es que Microsoft no ofrece a los usuarios de Windows XP actualizaciones gratuitas a Windows 10. Más importante aún, Microsoft no admite actualizaciones in situ de Windows XP a Windows 10.

En algunas situaciones, es posible realizar una actualización de salto de las ediciones de 32 bits de Windows XP a Windows 10, pero Microsoft no soporta ese proceso y no es práctico en la mayoría de los casos. Una migración de salto rápido, o leapfrog, primero requiere una actualización de Windows XP a una edición comparable de Windows Vista. Los administradores deben actualizar de Windows Vista a Windows 7 y, en última instancia, de Windows 7 a Windows 10. Este proceso funciona, pero está lleno de problemas; cualquiera de ellos puede potencialmente detener toda la migración. Solo las áreas de TI que no tengan otras alternativas deben considerar una migración de saltos.

Para los usuarios de XP que desean cambiar a Windows 10, Microsoft recomienda una instalación limpia del nuevo sistema operativo, pero eso requiere mucha planificación.

Planificación de actualización 101

Comience realizando un inventario completo de hardware y software de todas las computadoras de escritorio de la organización para determinar si cumplen o no con los requisitos de hardware para Windows 10.

Durante el inventario de hardware, recuerde que Windows XP es un sistema operativo más antiguo y puede ejecutarse en hardware más antiguo. Algunas PC antiguas pueden cumplir los requisitos mínimos para ejecutar Windows 10, pero pueden carecer de los recursos para ejecutar el sistema operativo de manera eficiente. También es relativamente común que las computadoras más antiguas tengan problemas de hardware que no se manifiestan hasta una operación importante, como una transición a un nuevo sistema operativo. Las áreas de TI que planean reutilizar el hardware de escritorio existente deben tener algunas piezas de repuesto a mano en caso de que surjan problemas durante el proceso de migración.

Uno de los problemas con la imposibilidad de realizar una actualización in situ a Windows 10 es que TI debe reinstalar todas las aplicaciones de escritorio en el nuevo sistema operativo. Tratar con estas aplicaciones es, con mucho, la parte más desafiante del proceso de migración. Al prepararse para una migración a Windows 10, hay cuatro preguntas que los departamentos de sistemas deben poder responder con respecto a las aplicaciones de escritorio:

  1. ¿Qué aplicaciones usan los trabajadores?
  2. ¿Estas aplicaciones son compatibles con Windows 10?
  3. ¿Tenemos los medios de instalación o alguna forma de instalar las aplicaciones?
  4. ¿Cómo demostraremos que la migración de la aplicación funciona?

Determinar qué aplicaciones usan los trabajadores es relativamente fácil. Hay innumerables utilidades disponibles que pueden compilar inventarios de software en computadoras de escritorio. Las cosas se ponen un poco más difíciles cuando se trata de determinar la compatibilidad de aplicaciones para Windows 10.

Actualizar herramientas y pruebas

El kit de herramientas de evaluación y planificación de Microsoft es una utilidad gratuita que puede ayudar a analizar las PC y determinar su nivel de preparación. La herramienta de inventario incorporada puede mostrar qué aplicaciones usan los trabajadores en toda la organización, pero también proporciona información sobre si cada aplicación es compatible con Windows 10 o no.

El kit de herramientas de evaluación y planificación puede ayudar a impulsar la planificación de la migración de Windows XP a Windows 10, pero en última instancia no hay sustituto para las pruebas. La única forma de saber con certeza si la migración será exitosa es establecer un programa piloto de implementación.

Elija algunos usuarios avanzados que tengan funciones de trabajo no críticas y permítales probar Windows 10. Estos usuarios deberían poder informar cualquier problema que puedan encontrar, que TI puede solucionar antes de implementar Windows 10 en toda la organización.

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