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Fintechs y deep learning en pro de la ecología

Mediante el uso de la inteligencia artificial, la fintech Cuenca ayuda a preservar los huevos de tortuga marina.

El desarrollo de nuevas tecnologías empresariales también tiene su lado social, y si la tecnología se desarrolla en código abierto puede permitir la creación de comunidades que ayuden a su entorno social o ecológico.

Este es el caso de Cuenca, fintech mexicana que está apoyando con su infraestructura de negocios para mejorar el monitoreo del desove de seis especies de tortugas marinas que anidan en playas mexicanas, ayudando a su cuidado y preservación, para lo cual colaboran con el campamento tortuguero Palmarito, ubicado en Puerto Vallarta.

Este proyecto inició por idea de Ricardo Sánchez, líder de ingenieros en Cuenca, quien nos comentó que fue el primer ingeniero que entró a la fintech, en septiembre de 2018, y desde el primer momento se dio cuenta que se enfocan mucho en la gente, no solo en la capacidad técnica. “En la platica inicial que tuve con el director, le comenté sobre mi proyecto de maestría, enfocado en el cuidado de los huevos de tortuga”, mismo que les pareció interesante para desarrollarse, aunque esto tardó un poco más.

Dicho proyecto de maestría se ideó en Cancún, lugar donde residía Ricardo y en el cual se unió a un grupo de voluntarios que cuidaba los nidos de tortuga marina. “Caminábamos muchas horas en busca de nidos y la única tecnología con que se contaba, por así llamarla, era una cuatrimoto”, misma que era usada por el encargado del campamento.

Sánchez partió a Inglaterra a continuar sus estudios de posgrado, ya con la clara convicción que su proyecto de maestría debía aplicarse en la vida diaria y con beneficio social, y es en la nación europea donde se planteó el proyecto de la monitoreo a las tortugas marinas. Al regresar a México como el líder de ingeniería de Cuenca, se enfocó en darle forma a este proyecto, en el cual trabaja desde septiembre de 2019.

Inteligencia artificial para salvar la vida marina

Es mediante el uso del aprendizaje profundo (deep learning) y un dron que el Campamento Palmarito se ha visto beneficiado en sus tareas de salvaguarda del quelonio marino. “La razón de usar tecnología de deep learning es la complejidad de la tarea en sí, ya que nos permite detectar los rastros de las tortugas y evitar confundir con otros”, explica Sánchez.

El ejecutivo detalló que el dron permite volar las distancias entre cada nido en menor tiempo y registrar todo en una computadora central que recoge la data, misma que será analizada por los procesos de inteligencia artificial (IA).

Por su parte el el aprendizaje profundo lleva a cabo el proceso de machine learning (aprendizaje automático) usando redes neuronales artificiales compuestas de niveles jerarquizados, de tal forma que en el primer nivel la red aprende algo simple, y luego envía esta información al siguiente nivel. El siguiente nivel toma esta información sencilla, la combina, compone una información algo un poco más compleja, y se lo pasa al tercer nivel, y así sucesivamente. Ayudando a reconocer no todo el ambiente, frente y fondo, evitando que se tome un perro por una tortuga, por ejemplo.

El jefe de ingenieros de Cuenca nos comenta que usan la librería Caffe Open Source y además del lenguaje C++ y Python. “Trabajamos en código abierto porque es una tarea muy compleja y necesitamos de mucha gente”, por esta razón lanzarán próximamente la convocatoria para los estudiantes y personas que deseen aportar a este proyecto, pues esperan ir sumando más campamentos y apoyos durante este año.

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