Empresas aprovechan la nube distribuida para mejorar su eficiencia

La nube, solución favorita para la transformación

Sí, la nube es la opción por defecto a la que recurren las empresas para modernizarse y acelerar sus respuestas. Pero, dentro de este modelo, las organizaciones prefieren los servicios de infraestructura de nube pública (IaaS) y software como servicio (SaaS), en los cuales invertirán presupuesto de TI en los siguientes dos años, según encontró ESG.

Además, las estrategias de nube híbrida ya están teniendo éxito. Si bien la distribución de las aplicaciones de producción entre la infraestructura local y la nube pública es casi idéntica (49 % frente a 51 %, respectivamente), las organizaciones esperan que esta distribución cambie ligeramente en 24 meses (47 % frente a 53 %). Esto sugiere que las organizaciones están madurando respecto a la creación de entornos de nube híbrida, gracias en parte a los esfuerzos de los proveedores que permiten la compatibilidad entre entornos, dice ESG.

Otro elemento que permite migrar más fácilmente apps locales a la nube pública es el auge del desarrollo de aplicaciones nativas de la nube. De hecho, la mitad de las organizaciones que prevén aumentar su porcentaje de aplicaciones en la nube pública en los próximos 24 meses afirma que esas aplicaciones serán una mezcla de apps nuevas y algunas locales existentes.

Además, a medida que continúa la modernización de la infraestructura local, las organizaciones pueden trasladar más fácilmente las aplicaciones de los servicios de nube pública de vuelta a las instalaciones si así lo requieren.

El estudio también encontró que la mayoría de las organizaciones utilizan dos o más proveedores de servicios de infraestructura en la nube. Para 75 %, la forma de uso es tener un proveedor principal y algunos otros proveedores de servicios de nube para fines más pequeños y especializados. “Es probable que este comportamiento cambie en los próximos años, conforme los proveedores de plataformas de datos mejoren la compatibilidad entre nubes, cuya popularidad va en aumento”, señala ESG.

Los datos se mueven entre entornos

El concepto de nube híbrida permite que las organizaciones puedan acceder a los datos sin problemas, independientemente de dónde estén almacenados o dónde estén desplegadas las aplicaciones. Las organizaciones ahora pueden cambiar entre entornos locales y en la nube, así como entre entornos en la nube, con relativa facilidad. Así, más de la mitad de las organizaciones (52 %) afirma que mueve datos entre sus centros de datos y los servicios de nube pública con regularidad, si no todo el tiempo.

La proliferación de estrategias y despliegues multinube también ha permitido una nueva era de movimiento de datos de nube a nube: 67 % de organizaciones utilizan tres o más servicios de infraestructura de nube pública, por lo que es lógico que el 50 % muevan datos entre servicios de nube pública constantemente. Enterprise Strategy Group espera que este porcentaje aumente en los próximos años, a medida que las plataformas de gestión de datos amplíen su compatibilidad con múltiples servicios de nube.

Automatización de infraestructura y operaciones, el otro gran acelerador

Independientemente de que las capacidades de la nube se requieran a nivel local o en entornos de nube pública, un denominador común para el éxito es la automatización. ESG señala que las herramientas de gestión de servicios de tecnologías de la información (ITSM) son el método más común para permitir la automatización de la infraestructura, según el 65 % de las organizaciones, ya que ayudan a estandarizar los procesos de servicio y agilizar las operaciones de TI.

Las organizaciones también están aprovechando las interfaces de programación de aplicaciones (API) (43 %), los sistemas de tiquets (37 %), la gestión de infraestructuras de centros de datos (DCIM) (43 %) y las herramientas de gestión de la configuración de la infraestructura como código (IaC) (35 %). “Para la mayoría de las organizaciones, el viaje hacia la automatización integral de la infraestructura no se produce (ni puede producirse) de la noche a la mañana, ya que el proceso requiere una amplia diligencia debida, incluida la priorización de los procesos que deben automatizarse”, dice el informe.

Las expectativas sobre la automatización en una amplia gama de casos de uso, como análisis de seguridad, monitoreo, alertas, informes y otros, son muy altas, y van más allá de la reducción de las cargas en las operaciones de TI. Por ejemplo, las organizaciones esperan mejorar la seguridad, reducir costos operativos, mejorar el cumplimiento y acelerar la entrega de iniciativas digitales de TI o empresariales. “La integración continua de la IA ofrecerá una automatización más inteligente, la cual permitirá a los clientes identificar más fácilmente los casos de uso y realizar un seguimiento del valor de sus inversiones en automatización”, afirma ESG.

No obstante, este proceso no está exento de preocupaciones. Las principales son el elevado costo de las herramientas de automatización (31 %), las dificultades de escalado entre ubicaciones (25 %), las diferentes preferencias entre equipos (24 %) y la búsqueda de la herramienta adecuada para el trabajo (24 %). ESG apunta que, si bien los problemas relacionados con los costos suelen ser inevitables, hay otros desafíos derivados más bien de la falta de experiencia con la automatización, sobre todo en el entorno único de cada organización. Por ello, probar las tecnologías en un entorno de pruebas puede ser una solución eficaz para muchos de estos retos.

Finalmente, las organizaciones esperan usar aún más las API para agilizar sus operaciones, mejorando las métricas de eficiencia y los KPI. En el reporte, el 70 % afirma que las API son muy importantes en esta función, pero también aplican muchos criterios para evaluarlas, tales como: la seguridad, la estabilidad, la facilidad de uso, la autenticación y una hoja de ruta tecnológica, entre otros.